El Jesús Real

 El Jesús Real

 por Servetus el Evangélico

Jesús de Nazareth es el hombre más famoso que alguna vez vivió. ¿Pero quién era Él?

Para aprender sobre Su personalidad debemos recorrer la Biblia. El Nuevo Testamento presenta a Jesús como un profeta, un maestro rabino, un predicador itinerante, lleno de sabiduría, un sanador carismático, un obrador de milagros y un exorcista. Se le aplica los títulos de Mesías/Cristo, Hijo del Hombre, Hijo de Dios, Salvador y Señor. Se afirma que nació de una virgen, vivió una vida libre de pecado en la obediencia a Dios y murió en una cruz en manos de hombres pecadores. Aún la muerte de Jesús estaba de acuerdo con el plan de Dios como la expiación para los pecados de otros. Aquellos que creen estas cosas de Jesús, Dios les perdonará todos sus pecados y les darán la vida eterna.

El Nuevo Testamento también afirma que Dios justificó a Jesús levantándole literalmente de los muertos. Revela que durante los cuarenta días siguientes Jesús literalmente apareció a muchos de Sus discípulos, después de los cuales subió de entre ellos al cielo. 

Entonces Dios exaltó a Jesús invitándole a sentarse con Él en Su trono. El Nuevo Testamento también revela que Jesús volverá a la tierra un día, trayendo con Él el Reino y la gloria prometida. Entonces Dios causará la resurrección de Su gente difunta así como el día del Juicio Final. Durante los primeros tres siglos, la iglesia se adhirió fielmente a estas enseñanzas bíblicas sobre Jesús.

Pero en los siglos cuarto y quinto, la iglesia (católica) institucional añadió que Jesús no era sólo un hombre sino también totalmente Dios poseyendo dos naturalezas una totalmente humana y una naturaleza divina, ésta llamada “la deidad de Cristo.” A través de sus consejos y credos, la iglesia pronunció que si alguien no creyera que Jesús era totalmente Dios —co-igual y co-eterno con Dios el Padre y el Espíritu Santo, llamando a estos tres “la Trinidad” — esa persona no creía realmente en Jesús y así no era un cristiano genuino. Los Católicos, Ortodoxos griegos y las denominaciones de las iglesias protestantes todavía abrazan oficialmente estas proclamaciones adicionales, afirmando que ellas se reflejan en el Nuevo Testamento. Al contrario, cuando la Iglesia Católica identificó a Jesús como Dios, se apartó de la enseñanza fundamental, bíblica, judeo-cristiana que Dios es "uno", llamado "el monoteísmo". Ocurrió porque, cuando la iglesia se estableció en tierras  paganas, gradualmente

(1) se hizo algo antisemítica,

(2) abandonó el principio establecido de usar sólo términos y categorías bíblicas a fin de identificar a Jesús,

(3) fue más allá de la Escritura introduciendo la metafísica griega dentro de la teología a fin de identificar a Jesús más exactamente, y por lo tanto

(4) el estado de Jesús interpretado como “el Hijo de Dios” metafísicamente, haciendo así este título sinónimo de la palabra "Dios", más bien que entender a Jesús que es el Hijo de Dios en un contexto judío, en el cual significa uno especialmente favorecido por Dios para ser el Mesías de Israel. Jesús no es Dios debido a las pruebas bíblicas siguientes o a la carencia de ciertas cosas:

No hay ningunas prueba en el Nuevo Testamento que Jesús alguna vez creyó que era Dios. No hay ninguna prueba del Nuevo Testamento que Jesús alguna vez afirmó que era Dios.

Hay pruebas en el Nuevo Testamento que Jesús negó que afirmara ser Dios.

En el examen de Jesús ante el Sanedrín, nunca se lo acusó que haya afirmado ser Dios.

La Biblia regularmente distingue entre Dios y Jesús como dos individuos separados.

El Nuevo Testamento constantemente intercambia las palabras "Dios" y “el Padre.”

El Nuevo Testamento repetidamente identifica "a Dios" exclusivamente como “el Padre.”

El Nuevo Testamento no contiene ninguna declaración inequívoca como “Jesús (Cristo) es Dios.”

En los evangelios sinópticos y en el libro de Hechos, Jesús nunca se identifica claramente como “Dios.”

Así, en los sermones de los evangelistas en el libro de los Hechos, Jesús nunca se proclama como “Dios "

Jesús no puede ser Dios porque Jesús dijo acerca de Sí:

“¿Por qué me llama bueno? Nadie es bueno excepto Dios” (Mark 10:18).1

“el Hijo no puede hacer nada por Sí mismo” (Juan 5:19, cf. v. 30).

 “Dije, ‘Soy el Hijo de Dios’” (Juan 10:33, 36). “El Padre es mayor que yo” (Juan 14:28).

“A ti Padre, … el único Dios verdadero y a Jesucristo quien Tu has enviado” (Juan 17:1, 3).“

Jesús dijo le dijo, ‘Subo a Mi Padre … a Mi Dios y su Dios’” (Juan 20.17).

Jesús no puede ser Dios debido a las Escrituras adicionales siguientes:

Jesús era visible pero Dios es “invisible” (Juan 1:18; 6:46; 1 Timoteo 1:17; 6:16).

Jesús era palpable pero Dios “mora en la luz inaccesible” (1 Timoteo 6:16).

Jesús fue tentado pero “Dios no puede ser tentado” (Mar 1:13 par.; Stgo 1:13).

Jesús murió en una cruz pero Dios es "inmortal" y así no puede morir (1 Timoteo 1:17; 6:16).

Jesús dijo que el Padre es “el que sólo es Dios” (Juan 5:44).

Jesús dijo en la cruz, “Mi Dios, Mi Dios, POR QUÉ ME HAS ABANDONADO” (Mat 27:46).

Pablo escribió que “Dios … es uno” y “único Dios sabio” (Romanos 3:30; 16:27).

Pablo escribió que el Padre es “único Dios” “y sólo Soberano” (1Timoteo 1:17; 6:15).

Pedro no podía haber creído que Jesús fuera Dios porque distinguió los dos:“ Jesús el Nazareno, hombre aprobado por Dios con milagros y maravillas y señales que Dios realizó a través de Él ” ( Hech 2:22).

“Jefes y ancianos, … Jesucristo el Nazareno, a quien crucificaste, a quien Dios levantó de los muertos” (Hch 4:10).

 “Dios le ha hecho Señor y Mesías— a este Jesús que crucificaste” (Hch 2:36).

“Jesús de Nazareth, cómo Dios le ungió con el Espíritu Santo y con poder, y cómo hizo bien, y sanó a todos que estaban oprimidos por el diablo; ya que Dios estaba con Él” (Hch 10:38).

Pablo el monoteísta no podía haber creído que Jesús fuera Dios porque escribió: “Hay un solo Dios y un mediador entre Dios y los hombres, el hombre Cristo Jesús” (1 Timoteo 2:5).“

Y no hay más que un Dios…. pero para nosotros hay sólo un Dios, el Padre, de quien son todas las cosas, y existimos para Él; y un Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas, y existimos a través de Él” (1 Corintios 8:6).

“Hay … un Señor, una fe, un bautismo, un Dios y Padre” (Efe 4:4-6).

“Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo” (2 Cor 1:3; 11:31).

“Cristo pertenece a Dios” porque “Dios es la cabeza de Cristo” (1 Cor 3:23; 11:3).

“Dios estaba en Cristo que reconciliando al mundo para Sí” (2 Cor 5:19).

“Gracia a ustedes y paz de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo” (saludos).

Jesús no puede ser Dios debido a los motivos lógicos siguientes:

Si Jesús hizo milagros por medio de una naturaleza divina, el 

Padre no hizo las obras de Jesús.

Si la capacidad de Jesús de hacer los milagros fuera intrínseca, no necesitó el poder del Espíritu Santo.

Dios es totalmente autosuficiente, pero Jesús necesitó el poder de obrar milagros del Espíritu de Dios.

No hay ninguna prueba bíblica que Jesús tenía dos naturalezas, eso afirmaría que es no humano.

Dios supera a su creación, de modo que ser Dios sería incompatible con ser humano.

Dios sabía la fecha aún futura  de la vuelta de Jesús a la tierra, pero Jesús no la sabía.

Así, el Nuevo Testamento no enseña que Jesús era Dios, sino que:

1  Dios envió a Jesús,

2 Dios era con Jesús,

3 Dios estaba en Jesús,

4 y Dios levantó a Jesús de los muertos. La visión tradicional que Jesús es Dios está basada generalmente en sólo unos textos bíblicos la Mayor parte de estos textos tienen problemas gramaticales, y las versiones de la Biblia a menudo se diferencian en cuanto a si llaman a Jesús "Dios".

5 Unos correctamente interpretan para significar que Dios estaba en Cristo. En suma, Jesús no era Dios, pero un hombre nacido de una virgen que soportó la tentación, el sufrimiento, la vergüenza, el juicio y la muerte para proporcionar la salvación y  justificación y Dios le exaltó de ella. ¡Alaben a Jesús y a su Dios!

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2 se declara más de cuarenta veces en el Evangelio de Juan que Dios "envió" o realmente "envió", a Jesús. 3 Juan 8:29; 16:32; Hch 10:38; cf. Juan 1:1-2. 4 Juan 10:38; 14:10-11; 17:21; 2 Cor 5:19.

5 Los más prominentes son lo siguiente: Isa 9.6; Juan 1:1, 18; 5:18; 10:30-38; 20:28; Romanos 9:5; Filipenses 2:6-7; 2 Tesalonicenses 1:12; Tito 2:13; Hebreos 1:8; 2 Pedro 1:1; 1 Juan 5:20